14 de enero de 2019
Nueva York, Nueva York
ayer manhattan fue madrid. en un santiamén me transporté a la avenida monforte de lemos, cerca de la plaza de castilla. en realidad caminaba hasta la estación de la calle 50, a unos cuantos pasos de times square, pero yo estaba en madrid. quizás tuvo que ver con la liviandad del día, con la necesidad de conocerme más, de escucharme más, tal como aprendí en aquel madrid adolescente que viví.
del tren pasé a otro tren y del otro tren a un autobús que me permitió llegar a mi destino final. me hizo pensar tal ecuación en cómo nueva york y cualquier otra ciudad, como dice eduardo lalo, es el escenario de los sueños, el espacio que los propulsa o delimita.
y es que nueva york llega a todos lados. a la pequeña italia. a la viviente pequeña china. a ecuador. a méxico. a san juan. a todos lados.
y con ello
me desprendo de la fantasía y me acoge la nobleza humana
me acoge el tiempo suficiente
me acoge el amor y el apoyo de extraños
me acogen frasescon amor,
yo